Editorial: Período de reflexión

Estar una semana alejado del bullicio incesante de información, posts y premios (creánme, que no es por gusto) le sirve a uno para reflexionar sobre esta carrera por el Oscar que se torna cada vez más interesante. Las papeletas para elegir los nominados a los Oscar ya han sido enviadas, y unos 5.810 académicos tienen hasta el día 12 de enero para votar a sus candidatos. Una vez que el tornado de la crítica ha pasado, la ganadora moral es "Slumdog millionaire", que se ha llevado la mayoría de los premios de los críticos. Eso sí, no ha avasallado como lo hicieron "Brokeback Mountain" o "No country for old men" en ediciones anteriores. Y le hacía falta. Una película de su tipo que tiene la locura de aspirar al Oscar sólo puedo lograrlo imponiéndose en casi todo. Y aún así, no tendría para nada el Oscar asegurado.

Siendo sinceros, "Slumdog millionaire" me recuerda a Obama. ¿Quién podía imaginar hace un año que un cuarentón negro casi sin recursos económicos para montar una campaña semejante podría alcanzar la presidencia de los Estados Unidos? Y más teniendo a una Clinton como rival. Y lo consiguió. "Slumdog millionaire" tiene la misma afrenta: parece extranjera, es la niña pobre y encima se quiere llevar el Oscar. Cierto es que Obama también perdió en algunas ocasiones frente a Hillary en las primarias demócratas y aún así acabó ganando. Pero si algo ha quedado claro es que los Oscar tienen aún menos racionalidad que una batalla por la presidencia del país más poderoso del mundo.

Cierto es también que si eliminamos a "Slumdog millionaire" de toda carrera, ¿quién nos queda? Sólo "The curious case of Benjamin Button" parece sonar como alternativa, aunque sólo ha convencido a dos asociaciones de críticos. Poco bagaje, sí, pero menos tuvo "Crash" y se acabó llevando el Oscar. Hay que tener claro que la crítica va por un lado y la Academia por otro. Por tanto, algo tan "insignificante" como un Globo de Oro le bastaría a "The curious case..." para convertirse en la favorita al Oscar. Así sí se puede: un Brad Pitt, una Cate Blanchett, un apartado técnico de lujo y encima un tío con talento como Fincher... Así es muy fácil ganar a la «débil» "Slumdog millionaire". Pero vamos a suponer que "Slumdog millionaire" llega de repente y ¡crack!, gana el Globo de Oro. ¿Daría de lado la Academia a una película que se ganó a la crítica y a la Asociación de la Prensa Extranjera? Vale, olvidemos el caso de "Brokeback Mountain" porque todos sabemos por qué no ganó. Si esto ocurriera, si el domingo 11 la cinta de Boyle se convierte en la gran triunfadora de la noche, sus posibilidades para llevarse el Oscar se multiplican. Una vez más, los Globos de Oro van a ser determinantes, aun cuando sus resultados también han sido desparejos con respecto a los Oscar en los últimos años.

A una semana del final de año, pensar en una tercera posibilidad parece inviable. "The dark knight", "Frost/Nixon", "Milk", "The reader" y compañía luchan más por la nominación que por otra cosa. En situación así, sólo cabe tener una reflexión final: la Academia en estos últimos años ha dado claros síntomas de cambio en su mentalidad, pero la hipotética victoria de "Slumdog millionaire" escenificaría finalmente ese cambio hasta ahora latente.

A día de hoy, pienso que la Academia contentará a la cinta de Danny Boyle con el Oscar a la mejor dirección y que "The curious case of Benjamin Button" lograra el Oscar de mejor película. Pero lo dicho: los Globos de Oro van a ser determinantes para saber si "Slumdog millionaire" tiene posibilidades de alcanzar su particular Casa Blanca.

PD: El jueves ponemos de nuevo la máquina a toda velocidad. Y así, hasta el 22 de febrero.