Actores para el Oscar (XIII): Angelina Jolie

Que un actor encuentre a su media naranja entre sus colegas de profesión no es del todo anecdótico, pero que una pareja sea nominada en la misma edición de los Premios de la Academia es un postre muy atractivo. Este 2008, Brad Pitt (por The Curious Case of Benjamin Button) y Angelina Jolie (por Changelling) pueden ser, aún más si cabe, el foco de atracción de los Premios Oscars y ya, si ganasen los dos, el delirio de la perfección.
Como sabemos, la actriz ya fue objeto de nuestra atención el año pasado por su loable transformación de Marianne Pearl, en A Mighty Heart, de M. Winterbottom, finalmente no consiguió la nominación; ahora por 2ª vez consecutiva aspira a su 2º Oscar (sería su 1º como Mejor Actriz Protagonista) gracias a la penúltima película del gran Clint Eastwood.

Nacida en Los Ángeles, el 4 de Junio de 1975, es hija de los intérpretes Jon Voight (Oscar al Mejor Actor por El Regreso en 1978) y Marcheline Bertrand, fallecida en 2007, que se separaron cuando la pequeña tenía sólo 2 años. Con apenas 7 años debutó en el cine, en una película protagonizada por su padre, Lookin' to Get Out, de H. Ashby. Ya en la adolescencia, se formó en el elitista Lee Strasberg Institute de New York, alternando por aquella época su trabajo en obras teatrales con el de modelo y actriz de videoclips. Su primer papel cinematográfico de cierto éxito fue en Hackers: piratas informáticos (1995), de I. Softley, donde conoció al que sería su primer marido, Johnny Lee Miller.

Su consagración como estrella del celuloide le vino en 1999 con dos títulos: El coleccionista de huesos, de Ph. Noyce, e Inocencia interrumpida, de J. Mangold, premiándosele éste último con el Globo de Oro y el Oscar, ambos en la cateogría de Mejor Actriz de Reparto. Jolie ya poseía 2 Globos de Oro, ambos como Mejor Actriz de Telefilme o Miniserie por George Wallace (1997) (de reparto) y Gia (1998) (protagonista).

Dueña de una belleza exuberante, inmediatamente, fue consagrada como sex-symbol del nuevo milenio, honor que ha ido conservando gracias, en parte, por su predilección por papeles donde se exaltan sus virtudes físicas: 60 segundos (2000), de D. Sena y, más aún, por su "Lara Croft" en Tom Raider (2001), de S. West, y Tomb Rider: La cuna de la vida (2003), de J. De Bont. En su heterogénea filmografía encontramos bodrios [Pecado original (2001), de M. Cristofer; Amar peligrosamente (2003), de M. Campbell; Vidas ajenas (2004), de D. J. Caruso, que llegaron a cuestionar si su Oscar fue del todo merecido]; éxitos de taquilla [Sr. & Sra. Smith (2005), de D. Liman]; superproducciones [Alejandro Magno (2004), de O. Stone; Sky Captain y el mundo de mañana (2004), de K. Conran] y obras de qualité [la ya mencionada A Mighty Heart (2007); El buen pastor (2006), de R. De Niro].
Divorciada de Lee Miller (1999), volvió a contraer matrimonio con el polifacético y controvertido Billy Bob Thornton (2000-2003) para desembocar en una historia de amor con Brad Pitt que ha despertado desde sus comienzos, en el set de Sr. & Sra. Smith, los más dispares comentarios. En estos años hemos sido testigos de sus numerosas adopciones y del nacimiento de Shiloh (2006) y los gemelos Knox Leon y Vivienne Marcheline (2008), sin abandonar su vida profesional, apareciendo en Beowulf (2007), de R. Zemeckis y Wanted (2008), de T. Bekmambetov.
Sus aspiraciones al Oscar están planteadas y consesuadas por la crítica… pero en un año, a priori, con tan buenas actuaciones femeninas, Jolie tiene que luchar fuerte, como sus heroínas, para vencerlas.